Principio de subsidiaridad
El principio de subsidiaridad es una norma jurídica que establece que las decisiones deben ser tomadas por la autoridad más cercana al ciudadano, es decir, que los asuntos deben ser resueltos en el nivel más bajo posible de la jerarquía. Este principio se aplica en el ámbito de la legislación y la jurisprudencia, y tiene como objetivo garantizar que los ciudadanos tengan el máximo control sobre sus propios asuntos, y que las decisiones sean tomadas de manera eficiente y efectiva. En resumen, el principio de subsidiaridad es una herramienta importante para garantizar la descentralización y la autonomía en la toma de decisiones.